Presuntos integrantes de "La Familia Michoacana" "levantaron" muy cerca de su domicilio, torturaron, ejecutaron de un balazo en la cabeza y decapitaron a un supuesto comerciante dedicado a la compra-venta de automóviles, cuyo cadáver dejaron abandonado horas más tarde, en plena vía pública, dentro de dos bolsas de plástico.
En una de las bolsas de plástico fue encontrada la cabeza del ahora occiso, la cual, según las autoridades policiacas, los presuntos homicidas de manera violenta y sin sentimiento alguno le arrancaron a puros machetazos.
Junto al cuerpo del supuesto comprador y vendedor de autos, los criminales dejaron escrito en una cartulina un narcomensaje que a la letra decía: "Esto les va a pasar a todos los chapulines y a los que no la creen hijos de su p... atentamente LFM".
El cadáver decapitado del desafortunado hombre, identificado por su esposa como Jesús Ríos Carranza, de 41 años de edad, fue encontrado la noche de ayer, dentro de dos bolsas de plástico abandonadas frente a una casa en construcción, ubicada en el número 25 de la calle Valle de Lier, en la Colonia Valle de Aragón Primera Sección, municipio de Nezahualcóyotl.
Después de que los desconcertados e impactados vecinos dieron parte del macabro hallazgo a las autoridades policiacas, más de 30 elementos de las policías Judicial, Estatal y Municipal se presentaron en el lugar y al confirmar que efectivamente dentro de las bolsas de plástico se encontraba el cadáver decapitado de un hombre, en ese momento desconocido, rápidamente acordonaron la zona y pidieron la intervención del agente del ministerio público para que diera fe de los hechos.
Posteriormente, cuando el MP realizó las primeras inspecciones oculares, informó que la cabeza del desconocido estaba en una de las bolsas y que el resto de su cuerpo se encontraba en la otra.
Luego, cuando el médico legista del centro de justicia de Neza-La Perla concluyó con la necropsia de ley, informó que el ahora occiso había sido brutalmente torturado y que después de ello sus verdugos lo ejecutaron de un balazo en la cabeza y ya muerto sin la más mínima misericordia le arrancaron la testa a machetazos, en una clara venganza de integrantes del crimen organizado, en este caso por el narcomensaje que se encontró, por supuestos integrantes de "La Familia Michoacana" que con sus acciones violentas siguen tiñendo de sangre el territorio del Estado de México, sin que exista autoridad policiaca alguna que les ponga un alto.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo a las versiones que dio la esposa del ahora occiso, éste presuntamente se dedicaba desde hace varios meses a la compra-venta de automóviles.
La impactada y destrozada mujer, explicó que la tarde de ayer, alrededor de las 16:30 horas, su marido salió de su domicilio a bordo de una bicicleta, supuestamente para entrevistarse con un amigo y que casi enseguida algunos de sus vecinos llegaron a su casa para informarle que varios sujetos que viajaban en un automóvil de color negro habían interceptado a su esposo sobre la Calle 9, en la Colonia Campestre Guadalupana, muy cerca de su domicilio, y que a punta de pistola y bajo amenazas de muerte se lo llevaron con rumbo desconocido a bordo del mismo auto.
Luego de la terrible noticia y cuando ya denunciaba los hechos ante el agente del ministerio público, agregó, recibió la noticia de que en la Colonia Valle de Aragón, Primera Sección, había sido encontrado el cuerpo decapitado de una persona que reunía todas las características de su esposo, por lo que de inmediato se presentó en el Semefo y al tener a la vista el cuerpo, aterrorizada y sin temor a equivocarse lo identificó como el de su marido.
Consternada y presa de la histeria, la mujer aseguró que desconocía quién o quiénes hayan asesinado de esa forma a su esposo y por qué motivo, pues como regularmente sucede en estos casos, afirmó que hasta donde ella sabía su marido era un hombre tranquilo y trabajador que se dedicaba a la compra-venta de autos y a quien no le conocía enemigos ni sabía que anduviera metido en malos pasos.
No obstante ello, por la forma en que se dieron los hechos y por el narcomensaje que dejaron los presuntos homicidas, la Policía Judicial consideró que el ahora occiso sí andaba metido en malos pasos y que fue asesinado en una venganza de presuntos mafiosos, a los que seguramente les falló o traicionó y no cumplió con los compromisos adquiridos.
A pesar de que agentes de la Policía Judicial aseguraron que los trabajos de investigación para el esclarecimiento del crimen ya se iniciaron, es evidente que por tratarse de un asesinato entre presuntos mafiosos va a quedar impune, pues como el mismo Procurador lo ha dicho, en este tipo de homicidios es "mejor no intervenir", primeramente por lo peligroso que resulta, luego por la seguridad de los mismos ministeriales y finalmente "porque entre más mafiosos se maten entre sí, mejor será para la ciudadanía, pues menos delincuentes habrá".
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